Русские видео

Сейчас в тренде

Иностранные видео


Скачать с ютуб ¿Puede la meditación por sí sola revertir el dolor u otros síntomas disfuncionales crónicos? в хорошем качестве

¿Puede la meditación por sí sola revertir el dolor u otros síntomas disfuncionales crónicos? 2 месяца назад


Если кнопки скачивания не загрузились НАЖМИТЕ ЗДЕСЬ или обновите страницу
Если возникают проблемы со скачиванием, пожалуйста напишите в поддержку по адресу внизу страницы.
Спасибо за использование сервиса savevideohd.ru



¿Puede la meditación por sí sola revertir el dolor u otros síntomas disfuncionales crónicos?

¿Puede la meditación por sí sola revertir el dolor u otros síntomas disfuncionales crónicos? La respuesta es No, por sí sola no. Entonces, ¿por qué hacemos tanto énfasis en ella? Hacemos énfasis ya que es una herramienta dentro de una cajita de herramientas que, combinada con otras herramientas, al modo sinérgico en que lo hace la TRD, SÍ que puede revertirlo. Nuestra mente, salvo en contadas excepciones, suele estar instalada en lo que se conoce como “default mode” o modo por defecto. Nos la pasamos “pensando” (casi siempre en lo mismo), construyendo una narrativa y saltando de un pensamiento a otro sin parar. Que se sucedan los pensamientos uno tras otro es, por decirlo así, “fisiológico” (normal). El problema no está en que pensamos, sino en qué se ocupan nuestros pensamientos mientras pensamos. Los pensamientos están casi siempre procurando nuestra supervivencia, lo cual es muy loable. Pero nuestra supervivencia a nivel mental se basa en construir una sensación de seguridad, de estar a salvo. Hasta aquí, todo sería ideal, pero debido al modelo interno que la cultura imperante nos modela, los pensamientos suelen transcurrir alrededor del miedo y de la falta. Nos la pasamos tratando de adelantarnos a lo que va a venir (cosa que es muy eficiente), pero el contenido de esa prevención suele ser de miedo y/o falta. Si a eso le añadimos un diagnóstico que, o bien nos atemoriza o nos genera desesperanza, ya que tras tiempo de intentos de buscar solución el dolor o los síntomas no se revierten, entonces aún rumiamos más, y lo que prevemos tiende a ser catastrófico. No nos podemos culpar por esto, es cómo funciona nuestra mente. Pero nos falta saber que la mente es neuroplástica; esto es, que los mismos pensamientos que nos llevan al miedo, la catástrofe y la desesperanza, los podemos entrenar para sacarnos de ahí. Y sí, he dicho bien: entrenar. Y ahí es donde entra el “deporte de la mente”: la meditación, en sus diferentes variantes y maneras. Al igual que no todos los deportes son iguales, tampoco todas las meditaciones. Ahora sabemos, gracias a las investigaciones en neurociencias contemplativas, que si conseguimos entrenar a la mente a salir de lo puramente cognitivo para aumentar lo “sentido”, se genera seguridad y confianza en uno mismo y en la inteligencia innata de nuestra biología. Prestar atención es una facultad de nuestra mente que hace posible el aprendizaje. No se aprende nada si no se presta atención. Además, la atención puede ser entrenada, como se entrena un músculo. La meditación viene a ser como el “deporte de nuestra mente”. Y al igual que no todos los deportes son iguales, tampoco lo son las meditaciones. La meditación que entrenamos en la terapia reversión del dolor es aquella que desarrolla la atención, de manera que saca a nuestra mente de una narrativa rumiadora, preocupadiza, controladora, crítica y, sobre todo, autocrítica. La meditación que practicamos en la TRD nos entrena en poner el foco en sentir las sensaciones que sentimos con atención plena, no solo en lo que pensamos (aunque, siendo estrictos, esas sensaciones también son pensadas). Además, nos facilita entrar en un modo en el que esa misma mente que antes nos proporcionaba miedo, ahora nos proporciona seguridad y sensación de bienestar. La narrativa biográfica del yo, que está basada más en lo cognitivo que en lo “sentido”, está relacionada con la ansiedad, la depresión y la sensación subjetiva de soledad. Ahora sabemos que entrenar la atención en las sensaciones y lo experiencial, en las sensaciones del cuerpo, está más ligado a la empatía, a la compasión y, en definitiva, a la calma. Y claro, cuando sentimos dolor, cuando el lenguaje que solo escuchamos es dolor, disfunción o malestar, es difícil volver a sentir calma, paz y bienestar. Salvo que lo entrenemos, que lo aprendamos. Nuestra biología responde a nuestra narrativa, a lo que pensamos (Eric Kandel, premio Nobel 2000). En la TRD te enseñamos a hablar ese idioma del “no-dolor”, del bienestar. En la TRD encarnamos la libertad de una vida sin dolor o síntomas continuos, y una de las herramientas fundamentales que utilizamos es el “deporte de la mente”: la meditación, que, realizada de esta manera particular, sí hace posible la reversión de los síntomas y el dolor. Puedes probar 4 tipos de estas meditaciones en mi canal de Spotify, en el siguiente enlace: https://open.spotify.com/show/3jw4hOM...

Comments